Cuando uno está estresado, agobiado por el trabajo -o tal vez simplemente falto de vitamina D-, unas vacaciones pueden parecer el tónico ideal. Tal vez te veas en lugares famosos, en una playa de arena o haciendo senderismo por un bosque frondoso, y sientas que empiezas a relajarte de inmediato. Está seguro de que cuando regrese se sentirá renovado, revitalizado, con un nuevo impulso. alegría de vivir.
Entonces, ¿por qué algunos de nosotros volvemos con la sensación de necesitar vacaciones de nuestras vacaciones?
¿Le resulta familiar? Entonces es posible que sufra agotamiento postvacacional.
¿Qué desencadena el agotamiento postvacacional?
Claro, el agotamiento postvacacional es un privilegio. Para empezar, significa que puedes irte de vacaciones. Pero eso no significa que no sea duro. A menudo, por ejemplo, la gente se pasa el año ahorrando para sus preciadas pocas semanas libres durante los meses de verano, y esto puede provocar expectativas poco realistas. La cultura capitalista y del ocio en la que vivimos nos anima a fetichizar nuestro tiempo de ocio y a concentrar toda nuestra energía en pasarlo lo mejor posible, lo que en realidad puede obstaculizar nuestro disfrute. Cuando no se cumplen nuestras expectativas, podemos sentirnos personalmente perjudicados.
¿Cómo puede asegurarse de que su reincorporación a la vida normal sea lo menos estresante posible? Hay algunos pasos sencillos que le ayudarán en su camino.
¿Por qué sufro agotamiento después de las vacaciones?
Si tiene la sensación de estar más estresado al final de sus vacaciones, no es el único. Hay muchas razones por las que puede sentirse así. Entre ellas:
Expectativas poco realistas: Como ya hemos dicho, mucha gente deposita todas sus esperanzas de descanso y relajación en las vacaciones. Sin embargo, esperar que unas vacaciones resuelvan todos tus problemas es poco realista. Cuando vuelvas a la realidad, puede deprimirte de verdad.
Estrés por viajar: Los vuelos largos, los cambios de huso horario, la planificación, la navegación, perderse y acostarse más tarde de lo habitual pueden dejarle más agotado que antes de partir.
Alteración de su rutina: No subestime los cambios en su patrón de sueño, dieta y actividad física cuando se trate de por qué puede sentirse agotado. Volver de repente a tu horario habitual puede ser como un latigazo cervical.
Hacer demasiado: Todos queremos sacar el máximo partido a nuestras experiencias, pero sobrecargar la agenda puede dejarnos exhaustos y con menos ganas de disfrutar.
Ajuste psicológico: Pasar rápidamente de una mentalidad relajada, de vacaciones en las que todo vale, a una rutina de trabajo puede ser un ajuste mental sorprendentemente agotador, que puede resultar abrumador y estresante.
10 consejos para combatir el agotamiento postvacacional
Ahora lo entiendes por qué puede que te sientas así, aquí tienes algunas medidas activas que puedes tomar para evitar este estado, de modo que puedas volver de tus vacaciones sintiéndote rejuvenecido en lugar de hecho polvo.
1. Permítase un día de descanso
Asegúrese de que, cuando regrese de su viaje, dispone de uno o dos días antes de tener que volver al trabajo. Puede aprovechar este tiempo para descansar, recuperar el sueño, deshacer las maletas y readaptarse a su hogar. Así podrá reincorporarse a la normalidad con suavidad, y no de cabeza.
2. Reintroduzca poco a poco la rutina
Reincorpórese a su horario habitual. Empiece por reintroducir su rutina matutina habitual: levantarse a las 7.30 en vez de a las 10, o desayunar muesli en vez de croissants con mermelada, por ejemplo. Restablezca su horario normal de comidas o de acostarse. Volver a introducir estas pequeñas estructuras de la realidad puede ayudarle a sentir que tiene el control.
3. Hacer una lista de prioridades
Cuando vuelva al trabajo, empiece primero por las tareas más importantes. Escriba una lista de lo que hay que hacer, identifique las tareas más críticas y, a continuación, enfréntese a ellas. uno por uno.
4. Utiliza técnicas de relajación si las necesitas
Añadir a su rutina la meditación, el yoga o ejercicios suaves de estiramiento puede prolongar los efectos calmantes de sus vacaciones. Incluso unos minutos de respiración profunda pueden ayudarle a relajarse.
5. Reintroducir la microdosificación
Tal vez tuviste un microdosis de psilocibina rutina antes de las vacaciones, pero tuvo que ponerla en pausa porque estaría fuera de casa. (y, por desgracia, la seguridad de los aeropuertos no es muy partidaria de llevar psicodélicos en el equipaje). O quizá aún no lo ha probado, pero está deseando hacerlo. En cualquier caso, ha llegado el momento. La microdosificación no sólo puede mejorar tu estado de ánimo en general, sino que también puede ayudarte a desestresarte y a estar presente en el momento. También puede ayudarte a concentrarte cuando vuelvas al trabajo. Añadir una rutina de microdosificación, ya sea la Método Fadiman o método de los días alternos también contribuirá a su vuelta a la regularidad al añadir una estructura que espera con impaciencia.
6. Mantener vivos los buenos recuerdos de las vacaciones
Manténgase conectado con las cosas positivas que experimente en su viaje. Comparte historias con tus amigos y familiares, mira las fotos que hiciste o incluso escribe sobre ello para mantener vivos tus recuerdos.
7. Sé amable con tu cuerpo
Puede que tu cuerpo haya dado la vuelta al mundo, subiendo y bajando cuestas, de aeropuerto en aeropuerto... (¡pueden estar muy separados!) Así que, ¿por qué no ser amable con él? Los viajes suelen provocar malos hábitos alimenticios y deshidratación, así que bebe mucha agua y come algo sano. Enseguida volverás a sentirte tú mismo.
8. Empezar a trabajar con "pasitos de bebé
Márcate objetivos pequeños y realistas cuando vuelvas al trabajo o a estudiar. Cumplirlos puede darte una sensación de progreso y recordarte que eres capaz. Puedes empezar por revisar algunos correos electrónicos o encargarte de un proyecto más sencillo.
9. Recurra a su sistema de apoyo
Ponte al día con los amigos que no viste durante tu ausencia. Estas personas pueden ser un recordatorio de todo lo bueno que tienes en tu vida normal, y puedes compartir historias sobre tu viaje, y tal vez escuchar algunas de las suyas también.
10. Si sospecha que el problema es más profundo, hable con un profesional
Si, al cabo de unas semanas, sus sentimientos de agotamiento postvacacional persisten, puede que haya una razón más profunda para su malestar. Habla con un terapeuta o consejero para obtener apoyo adicional.